[Sant Marti] La joya del Faraon. (Visitantes).

Narrar vuestra llegada hasta el museo, sin llegar a entrar en el museo, quedandoos en las puertas. Apartir de ahí empezará mi narración.


Objetivos de los visitantes: Los visitantes pueden pasar a ser guardianes o ladrones si lo desean en cualquier momento, solo pueden hacer un cambio (si has decidido ser ladrón, vete con los ladrones, si has decidido ser guardian con los guardianes), en caso de que no realicen cambios se llevarán un premio especial si viendose involucrados en el robo (por que hay gente que intentará robarla) salen indemnes en todos los sentidos.

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Jarko es visitante.
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Había llegado la noche, era la hora a la que había quedado tanto con su compañero Esteban como con Alice, ¿Quien sería la persona que iba a venir con Esteban?, realmente le daba igual, Jarko simplemente había conseguido dos entradas más y punto... esperó paciente en la salida de su callejón a que viniera el resto de gente, aún faltaban 10 minutos para la hora acordada.

Tras haber terminado los pendientes de la noche, Tayrel condujo su Camaro hacia el museo, la ventanilla estaba semi-abierta y pequeñas corrientes de aire azotaban el cabello del Ventrue que aun siendo pequeño revoloteaba sin cesar. A su lado venia Eileen o asi queria que le dijese, vestida propiamente, mientras que Tayrel con un traje pero sin moño puesto que aun no se lo colocaba.

Aparko el auto en una zona libre y espero en el auto un segundo, mirando el retrovisor para acomodarse el moño del cuello y verse mas elegante. Mira a Eileen y acenta con una sonrisa. Desciende del auto y gira hacia la puerta del copiloto ayudando a su acompañante a salir de alli.


Una vez hecho eso, apaga y cierra el auto con su control, siendo una noche que podria ser escandalosa venia preparado sencillamente, la glock recien comprada a Jarko y una sencilla.

Esteban montó en su coche con su acompañante y se dirigió al taller de Jarko, estaba bastante cerca del Cuervo así que apenas se habían montado en el coche cuando de nuevo habían parado, esta vez en doble fila para ir a recoger al propio Jarko y su acompañante.

- Esperame aqui Tun, vuelvo enseguida. - Esteban vestia más o menos la misma ropa de siempre, unos vaqueros, una chaqueta de cuero, camiseta y unas botas chulillas. Además de los guantes que le había confeccionado el propio Jarko.

Después de bajar del coche se acerco a la puerta donde debía estar Jarko y la dio 4 toquecitos para que éste se acercara y saliera de allí.

Había oido que habría una curiosa exposición esta noche, y como no tenía otra cosa mejor que hacer, pedí un taxi y me dirigí al museo donde estaba la exposición.
Bajé del taxi y eché un vistazo a mi alrededor, había bastante gente. Me dirigí hacia la entrada...

Ya venía hace varias noches esperando el evento, por lo que tenía el atuendo escogido con anterioridad y la excitación al máximo. El solo hecho de ver la joya y, de ser posible, tocarla, sería un regalo de los dioses para mí.
Luego de tomar un baño me visto con un elegante traje oscuro, como era de costumbre, y me subo al carro. Cubro mis ojos con unos lentes de sol, del mismo tono del traje, y conduzco hasta el museo.
Una vez allá, estaciono el vehículo en las cercanías y camino tranquilamente hasta las puertas del museo. Solo me aseguro antes, de llevar conmigo mis documentos personales y espero de pié el momento en que abrirán las puertas.

caminando sin rumbo por la calle sin nadie a quien molestar, la noche era comun, corriente y aburrida como todas, "tal ves si voy al cuervo digital y vuelvo a intentar pedir empleo pueda convencer a tungaska de que me contrate" pensaba, almenos era mejor que no hacer nada

en ese momento pasé por un museo y noté que habia mucha gente afuera

"hmmmm, parece entretenido, veamos..."

me diriji a la entrada del museo y me mesclé con la gente tratando de aberiguar que sucedia

Jarko salió viendo a Esteban en sus narices y a Alice al princpio del callejón.

Hombre, muchas gracias por hacerme el favor. ¿Al final quien viene contigo? dijo saludandolo y empezando a moverse, para entonces Alice ya le había visto. Llegando a la entrada del callejón Jarko le dió dos entradas a Esteban y otra a Alice diciendole a esta última Multipase, a pesar de ser una broma el gangrel no se rió, parecía no estar de humor ese día.

Alice, este es Esteban, Esteban, Alice. dijo presentandolos oportunamente. A Esteban lo conocí poco antes de abrir mi tienda en este mismo callejón y Alice fue la primera cliente de mi tienda una vez estuvo abierta. Jarko empezó a buscar con la mirada el coche de Esteban. ¿Donde está? preguntó haciendo una clara referencia al Cadillac.

- Ahora te la presento, esta en el coche. - Dijo mientras recibia los pases - Buenas noches Alice, encantado. - Saludo Esteban con una sonrisa a aquella chica que vestía de manera elegante - Si eres clienta de Jarko ya supongo que eres de nuestra misma condición... ¿verdad? - dijo mientras la miraba y la guiñaba un ojo.

Sin esperar mucho más Esteban dijo - Vamos el coche esta al otro lado de la calle. - y comenzó a caminar hacia el coche donde esperaba Tunguska. Una vez dentro del auto Esteban tomó la palabra. - Bueno esto de la presentaciones no es lo mio, esta es mi acompañante. - dijo señalando a la copilota del auto - y esto son Jarko y Alice - esta vez hablaba mirando a Tun - los besitos si quieres los dejamos para cuando bajemos del coche. - Esteban estaba un poco espeso en este caso esperaba que se presentaran ellos mismo.

Sonreí al recibir la invitación y la pequeña broma por parte de Jarko, él siguió serio, lo cual me extrañó un poco teniendo en cuenta su carácter normalmente afable. Guardé el ticket y miré al otro acompañante cuando me lo presentó, hice un ligero gesto con la cabeza.

- Un placer, Esteban. - Los seguí hasta el coche donde había alguien más, una mujer, la saludé brevemente y señalé mi moto- Yo tengo medio de transporte y sé llegar al museo, así pues en la puerta nos vemos ¿Os parece?

- De acuerdo, no hay problema. - Dijo Esteban a la nueva conocida.

Torrance aparto este día para la noticia que sin duda revoluciona Barcelona, una antigua joya que según los rumores posee facultades mágica, si pudiese poner sus manos en ella y entregarla para el bien de la familia, pero Torrance es una figura "publica", primero la imagen, y luego los intereses, si las ocasiones se presentaban todos quedarían felices, y sin duda el Sabbat no perdería la oportunidad de conseguir una joya como esa, y sin duda alguna vastagos de la Camarilla mas sociales asistirían.

Louis estaciono el vehículo Maybach Exelero 2008 colo negro, enfrente del museo, salio del vehículo, dio la vuelta y abrió la puerta para que Torrance descendiera.

Spoiler:

Torrance bajo de su vehículo, con toda la elegancia que se puede tener en la situación, una leve brisa peino el cabello, lleva un traje ajustado hecho a la medida, obviamente hecho por el mismo, avanzo unos pocos pasos con elegancia y una buena postura. Espero que Louis aparcara el vehículo, para caminar junto a el. Mientra esperaba que abrieran la puerta, se mantuvo lejos del tumulto de personas pero a la vista de todos.
Torrance mantenía su postura rígida pero elegante, mientras platicaba con Louis, con movimientos sutiles y con gracia.
Llevaba con el su Desert Eagle semiautomática, oculta entre sus ropas, la ultima ves que participo en un evento masivo, las cosas terminaron un poco mal.
Sin duda toda esta sencilla parafernalia es para llamar la atención y las miradas

Spoiler:

[Tirada para fijar las miradas y llamar la atención en Torrance: Apariencia+Etiqueta: 8]

El miembro 'Devil Doll' ha efectuado la acción siguiente: Lanzada de dados

'd10' :

Resultados :

Tras su primera misión aun se preguntaba como había terminado así. El viento que se colaba por la ventanilla jugaba con su cabello suelto, colocandolo detrás de su oreja para controlarlo un poco. Sonrió al mirar por la ventana como el edificio del museo se mostraba poco a poco hasta verlo por completo. Le devolvió la sonrisa a su compañero mirándolo bajar del automóvil.

Bajo dela auto lentamente tomando con delicadeza la mano ofrecida para tal acción. una vez fuera suspiro, sonriendo a Tyrel -espero sea una buena noche- comento mientras revisaba que su "uniforme" estuviera en perfecto estado para el evento de esa noche. Acomodo su cabello, negando levemente con la cabeza -cuando desee entrar señor Nath- comento amablemente.

Apariencia de Eileen:

Una vez que Tayrel ayudo a su bella acompañante a descender del automovil, extendio su brazo con un agil movimiento cual fuese realizado infinidad de veces. - Permitame...- dijo galantemente con esa voz propia del Ventrue, aun cuando no quisiese hacerlo esa voz encantadora lo acompañaba siempre, mientras concluia, tomo con su mano izquierda la delicada muñeca de su invitada, la textura de los guantes negros daba una sensacion del frialdad pero ¿Acaso no todos eramos asi?, continuo deslizando el brazo de la señorita por debajo de su hombro derecho, para finalizar enganchandola a él.

Mientras caminaban hacia la entrada del museo, Tayrel acerco su rostro hacia el de Eileen. - Vamos... creo que la que no gustaba de los formalismos eras tu o me equivoco E-I-L-E-E-N..?? - dijo en tono ironico y confidencial pero sin detener su paso lento pero firme.

- Olvidemos lo sucedido esta noche y disfrutemos de ella, ver una joya como esta Del Faraon solo se pueden en pocas ocaciones..- tras terminar de decir eso, se reincorporo alejandose de ella.

No había abierto la boca para presentarse cuando ya se le largaba una. Bajó los pies del salpicadero del coche, y sacó la cabeza por la ventanilla.

- Hola, ¿qué tal? Yo soy Tunguska. - dijo de seguido, había esperando nada y ya parecía impaciente - Pos eso, ¿para adentro no?

La oscuridad guiaba al asfalto hasta la majestuosa presencia de uno de los muchos museos de Barcelona, en este caso se trataba del museo de historia de Barcelona en la que se esperaba una exposición sobre la Joya del Faraón Menes, vivió en el año 3050 a.C.
El aparcamiento o las formas de llegar no era problema para ninguno, desde coches hasta trenes de cercanias pasando por taxis o autobuses podían llevaros a ese sitio, la vuelta ya era otro cantar.

Spoiler:

Una vez os encontrabais en la entrada pudisteis observar el museo en toda su distante majestuosidad, unas grandes verjas metálicas os serparaban del interior, donde la iesta aún no había empezado ya que no escuchabais música de ningún tipo.

En la mismisima verja había un guardia de seguridad que iba pidiendo las entradas, sin mediar palabra miraba las entradas que le iban siendo ofrecidas y dejaba pasar a los invitados.
(Todos aquellos que tuvierais entradas podeis pasar y seguir leyendo la descripción, los que no las tuvierais decidme que haceis).

Una vez dentro y tras pasar por unas grandes escaleras llegasteis a una zona de recepción, aún a las puertas del museo donde la gente esperaba que las puertas se abrieran, ahí empezaron a hablar entre ellos, por el mero hecho de hacer tiempo. Este tipo de eventos siempre tenía un retraso intrinseco.

Off: Los que vayais a hablar podeis ir a la sección "La joya del Faraón: Dialogos antes de entrar". El resto que no ha entrado decidme como entrais.

Así que hace falta entrada...Bueno, seguro que puedo pasar sin que me vean.

Me alejo lo suficiente de las miradas de la gente y entre las sombras me ofusco. Vuelvo a la entrada y trato de pasar ante el guardia de seguridad.

El intento de entrada de Virgil tuvo éxito, pudo pasar más allá del guardia sin problema de ningún tipo. Como era usual debido a la ofuscación las personas "se apartaban" inconscientemente a su paso, a pesar de que sus habilidades a la hora de utilizar su nueva disciplina no estaban del todo depuradas su innato instinto y su buena habilidad a la hora de pasar desapercibido harían el resto por él.

(Virgil pasa dentro.)